Pandillas, atracos, todo tipo violencia: contra la mujer, intrafamiliar, acoso escolar, bullying, la prensa todos los días nos bombardea de violencia y miedo, por una sencilla razón, porque esto es lo que vende, a los dueños de la periódicos y la televisión no les importa informar de forma veraz, sólo les interesa su negocio y el dinero.
El Espejo Negro: ¿a quien beneficia el miedo que se inculca en la sociedad por cuenta de los medios?
Carlos Castro: El miedo limita tus actos y he incluso tus pensamientos, el miedo es como una cárcel que te atrapa lo más frágil de la humanidad: tu mente. Destruye las esperanzas de una sociedad que ingenuamente cree que mañana será mejor, pero que no entiende, que si las cosas siguen como van, sin cambio y desarrollo social y cultural, todo será peor. Detrás de los grandes mass media, existe un gran poder económico de pocas personas, que ha monopolizado por años la comunicación de la desinformación; beneficiándose política y económicamente de lo que denominan democracia; pero parece más dictadura.
El Espejo Negro: ¿si en Colombia lo hechos violentos son pan de cada día, como ir en contra de la objetividad, paradigma fundamental del ejercicio periodístico?
Carlos Castro: En mi opinión, el problema del periodismo en Colombia no se trata de objetividad, sino de profundidad e investigación en las noticias. Por ejemplo, si tomamos sólo un caso hipotético, se pretende hacer una nota periodística sobre una marcha en contra de los retrasos de Transcaribe, está se desarrollaría respondiendo sólo lo siguiente: ¿Qué pasó? Se realizó una marcha ¿Dónde fueron los acontecimientos? En Cartagena ¿Cómo sucedieron? Hubo cientos de personas, clamando ¡No más corrupción! ¡Ni demoras! o ¡Hasta cuando!, obviamente la marcha está relacionada con las excesivas demoras y negligencias de los contratistas y administradores de ese proyecto.
En el caso anterior, hay objetividad en la medida en que se responden esas preguntas básicas y se omiten otras con intención; pero entonces, el verdadero ejercicio periodístico consiste en investigar, respondiendo a las preguntas que ni a los medios, ni al estado y mucho menos a los administradores de Transcaribe les interesa responder ¿Por qué la demora de las obras? ¿Por qué se ha duplicado el presupuesto? ¿Cuáles son las razones de la falta de dinero? ¿Quiénes son los culpables de las demoras? etc.
Si la sociedad se informara de cualquier tema (sucesos, cultura, economía, educación, e incluso política) a profundidad y con verdadera investigación periodística, estoy seguro que la opinión pública no sería pasiva ni silenciosa; la ciudadanía entendería la envergadura de los problemas y sería más consciente de sus derechos y deberes. Y exigiría respeto.
"Los medios impuros desembocan en fines impuros" Gandhi.
excelente!!!!